Heráclito de Éfeso, filósofo pré-socrático, compreendia que
I. o ser é vir a ser.
II. o vir a ser é a luta entre os contrários.
III. a luta entre os contrários é o princípio de todas as coisas.
IV. da luta entre os contrários origina-se o não ser.
Assinale
Questões relacionadas
- História - Fundamental | 04.1. Uma viagem pelo espaço rural brasileiro
Além do café, as fazendas produziam quase tudo aquilo que era necessário para a sobrevivência de seus moradores. Para dar conta de todas essas atividades e fazê-las funcionar bem, os espaços de produção de uma fazenda de café tinham de ser muito bem distribuídos.
Identifique cada um desses espaços na ilustração
- Língua Portuguesa - Fundamental | 9.13 Anúncio Publicitário: Cartaz
Leia o texto a seguir.
O texto foi escrito com a finalidade de anunciar a
- Biologia | 07. Taxonomia
O sistema de classificação taxionômica ainda hoje utilizado foi elaborado por Carl von Linné 101 anos antes de Charles Darwin publicar A Origem das Espécies.
Para Lineu, a invariabilidade das espécies é a condição da ordem na natureza.
Para Darwin, nossas classificações deveriam se tornar, até onde for possível adequá-las, genealogias.
Já no início do atual século, o pesquisador norte-americano Kevin de Queiroz propôs que adotássemos um novo código de classificação, no qual se perderiam as categorias taxionômicas mais amplas do sistema lineano (praticamente do gênero para cima) e que fosse norteado pelas relações de proximidade evolutiva entre os seres vivos.
A partir do texto, pode-se dizer que:
- Filosofia - Fundamental | 2. Patrística
(ENEM PPL) Se os nossos adversários, que admitem a existência de uma natureza não criada por Deus, o Sumo Bem, quisessem admitir que essas considerações estão certas, deixariam de proferir tantas blasfêmias, como a de atribuir a Deus tanto a autoria dos bens quanto dos males. Pois sendo Ele fonte suprema da Bondade, nunca poderia ter criado aquilo que é contrário à sua natureza.
AGOSTINHO. A natureza do Bem. Rio de Janeiro: Sétimo Selo, 2005 (adaptado).
Para Agostinho, não se deve atribuir a Deus a origem do mal porque
- Língua Espanhola | 2.02 Substantivos
TEXTO
EL NÁUFRAGO
Sentí que me moría de angustia. En un
momento me vi en aquel sitio muerto,
abandonado. Pero, luego, volví a oír al perro cada
vez más cerca. El corazón comenzó a darme
[5] golpes, a medida que se aproximaban los ladridos.
Me apoyé en las palmas de las manos. Levanté la
cabeza. Esperé. Un minuto. Dos. Y los ladridos se
oyeron cada vez más cerca. De pronto, solo quedó
el silencio.
[10] Luego, el batir de las olas y el rumor del viento
entre los cocoteros. Después, en el minuto más
largo que recuerdo en mi vida, apareció un perro
escuálido, seguido por un burro con dos canastos.
Detrás de ellos venía un hombre blanco, blanco,
[15] con sombrero de caña y los pantalones enrollados
hasta la rodilla.
Tan pronto como apareció en la vuelta del
camino me miró con sorpresa. Se detuvo. El perro,
con la cola levantada y recta, se acercó a
[20] olfatearme. El hombre permaneció inmóvil, en
silencio. No sé por qué, pensaba que estaba en
cualquier parte del Caribe menos en Colombia. Sin
estar muy seguro de que me entendiera decidí
hablar en español.
[25] —¡Señor, ayúdeme! – le dije. Él no contestó
en seguida. Continuó examinándome
enigmáticamente, sin parpadear.
— ¡Ayúdeme! – repetí, ansioso y desesperado,
pensando que el hombre no me entendía.
[30] — ¿Qué le pasa? – me preguntó con acento
amable.
Cuando oí su voz me di cuenta de que más
que la sed, el hambre y la desesperación, me
atormentaba el deseo de contar lo que me había
[35] pasado. Casi ahogándome con las palabras, le dije
sin respirar:
— Yo soy Luis Alejandro Velasco, uno de los
marineros que se cayeron el 28 de febrero del
destructor Caldas, de la Armada Nacional.
[40] Yo creí que todo el mundo estaba obligado a
conocer la noticia. Creí que tan pronto dijera mi
nombre se apresuraría a ayudarme. Sin embargo,
no se inmutó. Continuó en el mismo sitio
mirándome.
[45] — ¿Es marinero de gallinas? – me preguntó
pensando tal vez en las embarcaciones que
trafican con cerdos y aves del corral.
— No, soy marinero de la Armada.
Sólo entonces el hombre se movió. Se echó el
[50] sombrero hacia atrás y me dijo:
— Voy a llevar un alambre hasta el puerto y
vuelvo por usted. Sentí que aquella era otra
oportunidad que se me escapaba.
—¿Seguro que volverá? – le dije con voz
[55] suplicante. El hombre respondió que sí. Que volvía
con absoluta seguridad. Me sonrió amablemente y
reanudó su marcha. El perro continuó a mi lado
olfateándome. Solo cuando el hombre se alejaba
se me ocurrió preguntarle, casi con un grito:
[60] — ¿Qué país es éste? Y él, con una
extraordinaria naturalidad, me dio la única
respuesta que yo no esperaba en aquel instante.
—Colombia.
Texto adaptado de Gabriel García Márquez“Relato de un náufrago”
Apunta la forma plural correcta.