Reducir la emisión de gases de efecto invernadero: saludable y rentable

La directora de la Organización para la Defensa de la Salud, Irina de la Flor, subraya que ampliar el objetivo de reducción de gases de efecto invernadero en la Unión Europea de un 20% a un 30% duplica el ahorro económico y además reporta importantísimos beneficios para la salud de los ciudadanos. “A la hora de evaluar los beneficios de reducir los gases de efecto invernadero hay que tener en cuenta la disminución de bajas por enfermedad, el menor consumo de medicamentos, o de admisiones hospitalarias derivadas de enfermedades y patologías asociadas con la contaminación del aire”, continúa De la Flor. Ella sostiene que “una reducción en la emisión de gases con efecto invernadero supondría una mejora en trastornos tan comunes como la bronquitis, el asma, los ataques al corazón o la depresión. Para eso se debe incentivar el uso de las bicicletas y de caminar entre los ciudadanos, pues tal actitud mejoraría su salud mental, cardíaca y respiratoria y disminuirían los cánceres de pecho y de próstata. La Organización para la Defensa de la Salud forma parte de la Fundación Vivo Sano. Su principal objetivo es sensibilizar a la población sobre los riesgos de las tecnologías, sustancias y productos tóxicos presentes en nuestro entorno, así como promover políticas que protejan tanto a las personas como al medio ambiente frente a estos agentes nocivos.